Juguetes Waldorf.
Antes de hablarte sobre este tipo de juguetes, si te digo “educación Waldorf” ¿te suena? Déjame que te comente que se trata de una famosa corriente educativa que nació en 1920, fundada por Rudolf Steiner.
Este sistema educativo focaliza el desarrollo de niñas y niños desde su personalidad, en un entorno libre y de cooperación. En los espacios Waldorf el arte y los trabajos manuales cobran importancia y los exámenes se dejan a un lado.
Los juguetes Waldorf suelen ser juguetes de madera, orgánicos y ecológicos. Pero hay mucho más que eso ya que se trata de un recurso educativo. Estas son algunas de sus funciones:
Juguetes y el estímulo de los sentidos.
Ahora están de moda los artículos ecológicos y naturales, y esta tendencia también la encontramos en los juguetes. Los comerciantes lo saben y cada vez encontramos más en el mercado. Pero en las aulas Waldorf siempre han utilizado juguetes hechos de materiales naturales como madera, algodón, seda y lana. Entre los motivos para utilizarlos (además de la protección del medio ambiente) está la experiencia sensorial de los más pequeños y lo que les aporta. El estímulo de los sentidos es una de las características de los recursos educativos del método Waldorf por su importancia en el desarrollo cognitivo de niñas y niños.
Compara la experiencia: abraza una muñeca de plástico, dura, de pelo sintético; y ahora coge una muñeca Waldorf rellena de algodón, con cabeza de mohair y tejido suave. Esta última tiene una estética más agradable, además su con su tacto suave y su calor, esta muñeca Waldorf provoca un efecto reVer en Amazonlajante en niñas y niños.
La estética de un juguete bonito.
Un juguete Waldorf es bonito y estimula el sentido de la vista. El ambiente en la infancia debe ser hermoso y los juguetes también. Un entorno bello fomenta el sentido de bienestar, y desarrolla el sentido estético y su valor.
Desde la propia visión de Platón “el modelo más eficaz de educación es que un niño juegue entre cosas bellas”. Los juguetes hechos de materiales naturales, coloridos, artesanos, y amables en sus formas, estimulan y aportan mucho al "sentido de vida" de un niño.
Puedes comprabarlo con niñas o niños de tu entorno cercano, comprueba como se interesan más por un juguete hecho a mano y bonito, que por un juguete industrial de plástico.
Estimulando la imaginación de niñas y niños
Desde su fundación la corriente Waldorf recomienda que gran parte de los juguetes no estuvieran muy definidos en su forma, de manera que active la imaginación de los pequeños. Por este motivo los juguetes Waldorf son muy simples y con poco detalle.
Para los educadores Waldorf los juguetes tienen que ser abiertos, y para ello la simplicidad es fundamental. En realidad hay una gran cantidad de objetos que pueden convertirse en un juguete, y lo habrás visto en tu prole o en los pequeños de tu entorno: piñas, piedras, palos o ramas de árboles. Pásate un mañana por un jardín de infancia Waldorf ¿qué encuentras? Cáscaras que se convierten en alimentos, bloques transformados en dinero, un palo es un teléfono, las telas son velos, etc. Niños y niñas convierten esos objetos en más de una cosa gracias a su simplicidad, y su imaginación vuela.
Fíjate en una muñeca Waldorf. A penas tienen rasgos faciales, algunas no tienen cara. No es un anatojo, esto obedece a un aspecto propio de estas corriente educativa. La finalidad es fomentar sus habilidades de “representación interior” y “estimular la imaginación”.
Una niña o un niño juegan a las casitas y a cuidar al bebé, porque quieren imitar la vida real, y les será más fácil imaginar los cambios de humor de un bebé si no tiene predefinidas sus emociones. Basta con tener dos ojos y una sonrisa sugerida. Así experimentan plenamente la vida con su imaginación.
Los juegos de imitación para aprender a vivir.
Por naturaleza niñas y niños quieren imitar a los mayores en su día a día. Así que debemos esforzarnos por ser dignos de imitar. Los pequeños van a observarnos mientras trabajamos en casa, cocinamos o limpiamos. Hagámoslo con cuidado y tranquilidad.
Si les das versiones infantiles de artículos para el hogar, como herramientas, una cocinita de madera, una la cacerola, o una fregona, les va a encantar. Ademaś lograrás que participen con su imaginación imitando la vida cotidiana, y que desarrollen habilidades de la vida real también.
Elegir juguetes va más allá de un juguete bueno o un juguetes malo, te recomiendo que te hagas esas preguntas: ¿se siente bien con él? ¿Es bonito? ¿Está abierto para la imaginación? ¿Fomenta el juego imitativo? Si las respuestas son afirmativas, te felicito lo pequeños tendrán las recursos necesarias para un juego divertido y saludable.